Somos una organización comprometida con erradicar los estigmas y barreras que dificultan la dignidad en la gestión menstrual, contribuyendo a un cambio socio-cultural que reconozca la menstruación como un derecho humano.
Porque la menstruación sigue siendo un secreto a voces y, en nuestros territorios, representa una barrera que limita la vida digna de miles de personas. Reconocemos que este proceso está rodeado de estigmas, desinformación y barreras sociales, culturales y de infraestructura.
La salud de las mujeres y personas menstruantes ha sido históricamente reducida a la reproducción, mientras las narrativas y regulaciones sobre nuestros cuerpos han perpetuado mitos y desigualdades.
La funcionalidad de un cuerpo con útero va más allá de la reproducción. Esta continua exclusión de la agenda pública refuerza la idea de que la menstruación es un asunto privado, un tabú que debe llevarse en silencio.
Nuestro propósito es trabajar por una justicia menstrual que garantice la autonomía, bienestar y condiciones integrales para gestionar la menstruación dignamente.
“Aunque la mitad del mundo menstrua, todavía no está claro por qué hablar de esto es importante. Sigue siendo un secreto en la agenda pública.”
Entérate de lo más reciente; creamos este espacio, para la diseminación de nuestro trabajo y las últimas publicaciones.
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